Ya sea de ida o de vuelta, los vuelos largos muchas veces son pesados y las películas o las playlists no son suficiente para mantenernos entretenidos por tantas horas. En cambio, un cuaderno y una pluma o hasta las notas del celular, son armas poderosas que nos pueden mantener felices y darnos recuerdos que duren para siempre.
El día de hoy, te voy a compartir una idea bastante efectiva para atraer buenas vibras a tu viaje.
Si vas “de ida” escribir tus objetivos del viaje es una idea increíble que te va a llenar de motivación, puedes ponerte metas de turisteo como “ tomarme una foto en tal lugar...”, “mandarle una postal a mi bff”, “grabar un video para mi novio en un lugar que visitamos juntos acordándome de él” etc... O también puedes ponerte metas más personales como “estar sola todo un día y caminar por la ciudad”, “escribir un diario de viaje”, “aprenderme a mover en el transporte público de la ciudad que voy a visitar” etc.
Otra buena idea para escribir es agradecer y el reflexionar por qué estás aquí, ¿trabajo?, ¿viaje familiar?, ¿viaje de ti para ti?, ¿viaje con amigas?, ponte a ver tú vida en perspectiva y reflexiona el por qué estás en ese avión, en este momento, que cosas malas y qué cosas buenas te trajeron a esta nueva aventura y date cuenta que mínimos detalles te trajeron a ese día y a todo lo que está por venir.
Otra buena idea para las reflexiones de ida es escribirle una carta a tu “yo después del viaje”, contándole tus expectativas y diciéndole lo bien que se la debe pasar, lo que no se puede perder, lo diferente que se va a sentir cuando termine este viaje etc. Va a ser increíble cuando te leas otra vez terminando el viaje y te des cuenta que casi todo, si no es que todo lo que le escribiste a tu “yo del futuro” ahora es una realidad.
Despedirte de tus seres queridos por el tiempo que te vas también es una manera positiva de mandar amor desde lejos. Por ejemplo, yo le acabo de escribir una carta a mi roomie, solo me voy dos semanas pero la voy a extrañar muchísimo, hemos vivido tantas cosas increíbles estos últimos meses que no la podía dejar dos semanas sin agradecerle y recordarle cuanto la quiero.
Ahora, si vas de regreso, escribir es todavía más inspirador.
Cuando era chiquita (17), mi tío me regaló un viaje a NY y cuatro años después, cuando regresaba de mi intercambio de París, le escribí una carta a ese tío diciéndole que gracias a que tuve ese gran regalo de viajar a los 17 años, él despertó en mi las ganas de comerme al mundo y conocer todos lados.
Obvio si haces nuevos amigos en el viaje o ciertas personas te ayudaron, ten el detalle de agradecerles en una carta o simplemente escribir para ti lo que te dejaron/aprendiste de ellos.
Otra buena idea es hacer una reflexión sobre el viaje. Yo creo que esta es mi idea favorita. ¿Qué aprendiste en este viaje?, ¿Cómo creciste como persona?, ¿Qué fue lo que más te gustó? ¿Qué cosa creías difícil y fue lo más fácil? ¿Cuándo fuiste más feliz? ¿Qué será lo que más extrañarás? Ahora que viste tu vida un poco en “perspectiva” ¿Qué quieres cambiar de ella? ¿Qué quieres mejorar?
Escribir cosas así tiene mucho más poder de lo que piensas, no soy una experta en el tema, pero por lo que entiendo, las palabras escritas con motivación, sentimiento y concentración, se quedan en nuestro subconsciente. De alguna manera todas esas vibras de positivismo, agradecimiento y felicidad, atraen más y más de eso. Que se puede ver reflejado en nuevos viajes, más aprendizajes, conocer más gente admirable, conocer más seguido nuevos lugares, ente otra infinidad de posibilidades.
Yo soy fiel creyente de que “si lo crees, lo creas” y creo que me ha funcionado bastante bien, así que créeme, ponte a escribir y atrae esas cosas que siempre has querido (ojo. No aplica solo para viajes, si no para todo) así que, vas, comienza a hacer tus sueños realidad!
-LF