Después de un fin de semana en Acapulco con mi #NotSoBasicCrew (@thealens, @blogitmexico y @juliocortes1706) No podíamos esperar a viajar de nuevo y justamente después de 4 largas horas de camino a Acapulco, vimos Cuerna como un destino súper cercano y perfecto para visitar.
Ya me habían platicado del hotel Flor de Mayo y sus increíbles fiestas con DNA magazine, así que no dudé un segundo en elegir este hotel. Desde semanas antes de llegar ya estábamos ansiosos por el delicioso clima de Cuerna y más que listos para disfrutar de la alberca y las lindas instalaciones.
El primer día, de lo que más disfrutamos fue de Patio 603, el restaurante de Flor de Mayo, que tiene unos platillos mexicanos fusión de lo más rico. Ya saben que yo soy súper postrera, por lo que el Strudel de temporada fue lo que se robó mi corazón desde el primer día, sin embargo todos los días probamos algo nuevo que nos encantó a todos (No juzguen si les digo que un platillo tan simple como el Sándwich Vegetariano, fue lo que más me gustó, era una combinación excelente).
El sábado disfrutamos delicioso del Room Service, la habitación estaba de lo más deli y pasamos gran parte de la mañana en la comodidad de nuestras camas. Julio quedó fascinado con los chilaquiles, dijo que eran los mejores que había comido en mucho tiempo (y ya saben que el con eso de los chilaquiles es súper picky picky picky).
Toda la tarde disfrutamos bajo el sol al rededor de la alberca, la música estaba súper a gusto, habían snacks deliciosos (cacahuates preparados, guacamole, nachos...) y bueno ya saben que con buen clima, buena comida y buenos amigos, no hay falla.
Les juro que pasamos un día tan bueno, que nos quedamos platicando (ahora bajo las estrellas), hasta como las 2am. Súper, súper a gusto.
El domingo, ahora si nos levantamos a disfrutar del BRUNCH del hotel, bueno, Andrea y César se levantaron desde antes para disfrutar de la alberquita súper temprano. El hotel cambió totalmente de look con el brunch, sacaron una mesita súper linda, mimosas, malteadas, flores. Todo muy ad hoc a la ciudad de la eterna primavera.
Ese día, decidimos disfrutar la ciudad (y ya que la ubicación está perfecta y justo en el centro de la ciudad) fuimos a caminar a los Jardines Borda y a apreciar lo que alguna vez fue la casa de verano de Maximiliano de Hasburgo y Carlota Amalia.
En general, el viaje fue el break que necesitábamos. Nos alejamos de el caos, la contaminación y el clima bipolar, para llegar al calorcito, el sol, la tranquilidad y los buenos precios.
Todos tenemos merecido un descanso de vez en cuando y no hay que ir tan lejos, Cuerna es el escape ideal, lleno de hotspots, restaurantes, jardines, museos, barecitos... ¡El centro de México en todo su esplendor! Además a unos minutos de Tepoztlán, el lugar con los cerros más bonitos que he visto en mi vida (y eso que viví en Chiapas y MTY).
Flor de Mayo, además de tener un diseño arquitectónico digno de apreciarse, cuenta con unas habitaciones súper cómodas, spa, comida deliciosa y todo lo que necesitas para pasar un excelente fin de semana.
Les dejo sus redes sociales:
Facebook: Flor de Mayo Hotel & Restaurant
Instagram: @flordemayomx
Y no se olviden, "Life is so much easier when you just Chill Out"
LF
