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Luisa Ferss

W Bambú SPA... El lugar ideal, para un día perfecto.


Fotografía: Julio Cortés

Hace como un año y medio, tuve una sesión de fotos en Chiapas y me maquillaron en un lugar súper bonito ¿saben que fue lo que más me sorprendió? Casi todo el maquillaje era Chanel y todo en el lugar era de muy alta calidad, honestamente no es algo súper común de ver en Chiapas, así que yo estaba fascinada. En diciembre, me enteré de que ese lugar de sueño que había visitado, es uno de los mejores spas a nivel nacional, obviamente tenía que darme una vuelta por allá y platicarles TODO sobre W Bambú.

A pesar de que apenas estamos empezando el año, no saben como me URGÍA un día de descanzo, paz y tranquilidad, así que me olvidé un ratito del caos y el tráfico del DF y volé a mi querido Tuxtla Gutiérrez. Planée mi día en el W Bambú con mucha cautela, obvio me moría por tomar unas fotos increíbles para que ustedes disfrutaran de la reseña, pero mi objetivo principal ese día era que YO disfrutara muchísimo y lo logré de una manera impresionante, ¡les cuento!

Xunashi, fue la encargada de enseñarme las instalaciones de W Bambú ¡no puedo creer que yo sólo conocía el área de salón de belleza! Me había perdido de todo un jardín, un área de manicure y pedicure al aire libre y mi favorito: el área de masajes e hidroterapia.

Sólo vi la alberca y sabía que mi día tenía que empezar ahí, estaba a temperatura ambiente y a pesar de ser invierno en Tuxtla Gutiérrez estaban a 33º así que disfrutar un ratito en la alberca era ideal, ¿saben que fue lo mejor? no había desayunado y en el paquete VIP de W Bambú te dan fruta con chocolate ¿se imaginan? Desayuné a la orilla de la alberca fresas, uvas, mañzana ¡súper frescas y dulces! Creo que no hay una mejor combinación para empezar el día.

Ya después de haber nadado un rato, me pasé al jacuzzi, en dónde disfruté un ratito una copa de vino ¡no me juzguen de que era temprano! No es lo mismo estar en el jacuzzi relajandome, a estar en el jacuzzi relajandome Y además disfrutando una copa de vino. Yo se que ustedes tampoco se hubieran resistido a tener ese momento de serie NewYorkina.

Después pasé a el área de masajes; no es broma que nada más tocaron mi espalda las manos de Clara, fue algo así como ¡magia! Relajación instantánea, de verdad no saben ¡qué rico masaje! En ese momento las mil tareas que tenía que hacer al regresar al DF, las preocupaciones ¡todo lo estresante! se fue de mi cabeza.

Ya relajada y lista para divertirme, salí del área de masajes para encontrarme con mi buenísimo amigo (y maquillista estrella) Jordi Avendaño. Resulta que ese día, él iba a dar un curso de maquillaje al personal de W Bambú y yo sería su modelo ¡Fue de lo más divertido y aprendí algunos trucos! Jordi estuvo dando tips súper novedosos para maquillaje de día. A pesar de que yo era la modelo y no podía estar hablando o preguntando, estuve poniendo más atención que en la escuela a todo lo que él platicaba ¡Imagínense! Empezó a dar unos consejos que le había pasado el mismo maquillista de Leticia de España, o sea yo ya me estaba sintiendo casi casi de la realeza.

Al terminar mi rato de modelo, me fuí al área de manicure y pedicure al aire libre, estaba muy fresca y muy iluminada, aparte mientras me hacían el mani/pedi me relajé un rato más en el súper sillón de masajes. Lo único estresante de ese momento fue elegir el color del barniz, habían TANTOS y súper bonitos, que fue un momento de tensión en mi cabeza.

Terminando, ya con pies y manos perfectas, regresé al área de masaje para agradecerle toda su ayuda a mi fotógrafo estrella con quién casualmente cumplía un año nueve meses. Fuí la mejor novia del mundo y le regalé un masaje en parejas ¡No saben lo feliz que estuvo después de ese masaje! Le cayó perfecto, él había viajado toda la noche y estaba hiper cansado, pero después del masaje salió súper repuesto y con mucha energía.

Mi visita al W Bambú, fue todo lo que yo esperaba y mucho más, tienen un personal increíblemente amable y bien capacitado, cada servicio que me hice fue de alta calidad, con cada detalle perfectamente bien cuidado ¡y bueno! de las instalaciones yo quedé enamorada, cuando me platicaron que en el área de masajes e hidroterapia hacían despedidas de soltera con champagne, tratamientos, el jacuzzi y la alberca ¡UFF! casi hasta me dan ganas de casarme (luego recapacité), pero ¡me fascinó la idea! Me imagino que se pone increíble. Ya quiero reunirme con mis amigas y proponerles ésta experiencia de lujo.

Ustedes tampoco se pueden quedar sin visitar el W Bambú, los que no viven en Chiapas ahora sabrán que en Tuxtla pueden hacer algo increíble en vez de sólo aterrizar. Si son de Chiapas no sé que están esperando para hacer sus reservaciones, 100% Recomendado.

No se olviden que es muy sano e importante consentirse de vez en cuando :)

LF

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